LO QUE SEPARA A UN PSICÓTICO DE UN PSICÓPATA

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LO QUE SEPARA A UN 

PSICÓTICO 

DE UN PSICÓPATA

“Para Lacan lo que ocurre aquí es que el sujeto no quiere matar ni a su yo, ni a su superyó, sino a su enfermedad: el pasaje al acto de Aimée lleva la agresividad contra una persona inocente (la actriz Huguette Duflos) para liberarse del enemigo interior que es “la enfermedad de la personalidad”.




Como el caso Aimée es el de una paranoica, Lacan actúa sobre la clasificación de Guiraud y agrega los crímenes del superyó. En esta categoría es donde ubica el caso Aimée.




Vamos a decir que Kakón es una palabra griega de género neutro que significa “lo malo”. Se la puede vincular con el “objeto malo” de Melanie Klein, que sería aquello que hay que expulsar al exterior. En este caso, la enfermedad. El enemigo exterior que Aimée apuñala es el símbolo de ella misma. El Kakón implica la identificación del ser al objeto.



Nos gustaría agregar que luego, décadas más tarde, Lacan superará la dicotomía interior-exterior con la topología matemática y la aparición del concepto de éxtimo. El adentro y el afuera son una y la misma cosa: así lo representa la banda de Moebius.”

“No puede dejar de hablar”: “

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El cuadro terminal es un sujeto que no cesa de hablar, en una total desconexión con el otro. Hay una ruptura de la noción de conversación, es decir, no sólo rompe el diálogo interno, sino además con el otro. (Es como una catarata de palabras. Una catarata de significantes, dirá Lacán, salen de algún lado, caen como cascada y no pueden parar).”

Quién haya oído hablar a alamodadomala… es el mismo






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Así, todo lo que necesité decir ya lo había dicho. Se trata de devolverle a las palabras su función. Y para eso tengo que tirar todo lo que sobra. Yo no leería todo este laberinto, de hecho el efecto que causan en mí esas señales es el de que yo acabo hablando como él. En el intento de repeler toda esa diarrea, acabo yo con ella. Lo que yo cuento es lo necesario para que esté en la realidad puesto que está en la realidad. Me doy cuenta ahora por tercera vez, tal vez más, de que cuando borro lo que llevaba escrito se tira un rato largo sin señalar. Es porque recojo su verborrea por lo que adquiere sentido. “Se viene a hablar aquí“ y lo hace con la desorganización a la que hace referencia uno de esos epígrafes. Si se viera a esa una, sola, única persona que habla con todas esas voces… le vi algunas veces con el Nick de el_conejo_duracel y me quedé a cuadros de cómo hablaba con un mismo Nick como si fuera muchos, ideas que se pegaban unas con otras y todas en el mismo discurso. Ahora ha desplegado “sus personajes” y pasan todos como personas independientes, y si alguien le dice que son el mismo, es a ese alguien al que lo consideran loco.



Intentaré condensar, porque la trama consiste en provocarme más y más para que nunca me vaya de esta silla. Romper el diálogo con el otro es esto, es bombardearme a mí con señales y luego atacarme porque digo lo que “me hace aquí”. Ni menos ni más. y todas las escaramuzas y todos los linchamientos sobran. La gente que le sigue protegiendo, empieza a ser tan responsable como él. Tengo un texto que habla de esto, de qué responsabilidad tendrá un sujeto en tales condiciones, porque si esto está siendo posible, es por las consiguientes escaramuzas que hace respecto a esa responsabilidad. Si hubiera sido un brote de unos días, tal vez tendría otra dimensión. Pero cuando está siendo algo sostenido durante más de seis años, con sus días y sus noches, el hecho de que haya un delirio de base, no significa que esté exento de responsabilidad, señala igual a una cosa que a la contraria, a que “sabe” tanto como a qué “no sabe”, es decir: nadie sabemos de lo inconsciente, pero sí vemos lo que ocurre derivado de nuestros propios actos en esa realidad, luego es por completo responsable de mantener a ultranza una situación de violencia por mucho que, la certeza que constituye el deliro no sea consciente de cuál es. El trabajo que yo ayer publiqué en ese blog,

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no es el de una mujer que se hubiera dedicado a perseguir durante años a otra burlándose día sí día también de estar negando lo que hace, esta persona tiene plena conciencia de cómo es como consigue mantener a raya sus actos de la condena pública y otra cosa muy distinta es que yo trate de encontrar incluso en un monstruo así una explicación humana. Ignorar para mí debe ser atarme a otras personas y a otras ideas con tal firmeza que pueda contra esa fuerza desatada. Incluso en los señores de la guerra debe haber un factor psíquico y, a juzgar por lo que hacen, deben estar muy enfermos, pero eso no les exime de ser responsables en absoluto de lo que estén haciendo.



Lo que consigue con esas señales que son la invasión más obscena que se le puede hacer a una persona, es que acabe yo afuera de las palabras… más allá de que sé que hubo o hay una identificación y todo lo que trato de ordenar con citas y epígrafes, tiene plena conciencia de lo que está haciendo y tiene sobre todo plena conciencia de cómo hacer para que no le cacen. Lo único que coincide con el síntoma es la gratuidad de la agresión. ¿Era Hitler responsable de sus actos o no? Porque este individuo que se dedica a publicar por todas partes artículos en defensa de Gaza y de las violaciones a las mujeres o a los niños, este hijo de perra que me acaba de señalar ahora mismo, es el que … es el mismo, ¿quién iba sino a señalar todas estas veces? Lo puede meter en el canasto de que es Althusser o en el de que es Neruda, este… no sabe nada de nada y cuando pone al lado de dos escritores el crimen (a Neruda lo estuvo poniendo de … porque había abandonado la curación de su propia hija y ésta murió por su culpa, eso cuenta él) el caso es que lo dice, yo no entro en nada más, cuando dice eso, omite lo que le da la real gana y se refuerza en ese mismo público que ni concibe la relación de lo que dice con estos actos. Lo que está diciendo es que él es escritor “aunque para serlo tenga que ser como lo que dice de ellos”… y mucho más demente que así porque lo cuenta cuando es ya pasado, proyectando hacia la impunidad un cínico reconocimiento que además lo interpreta según le conviene. Del caso de Aimée me interesó una cuestión, la de “los divinos detalles”. En lo que publiqué ayer no habla de eso, Lacan sitúa ese término, en el caso de Las Hermanas Papin, en los detalles, tales como que dicen “buena la hemos liado” después de cometer un crimen atroz. Este individuo tiene, no una, sino muchas compulsiones de las que nada quiere saber, pero controla perfectamente las señales y sobre todo el encubrimiento de ellas. Yo siempre dije que, me cabía pensar que “ no pudiera dejar de señalar”, si hay precipitación la habrá… pero hay un tiempo otro en el que al menos tendría que reconocer que tiene ese problema, que lo está haciendo. Ahí es donde yo no sitúo ya ningún síntoma, sino el goce de él. Y no ya de manera inconsciente, sino como lo que separa a un psicótico de un psicópata.



He borrado unas cuatro páginas y creo que ya me he vuelto a exceder. Ni siquiera dedica a esta “necesidad” atención, es como el que tiene varios recursos y los aprovecha indiferenciando un chat de mi vida. Porque estoy en mi casa, no en la suya, no en la de esa señora, la sin_red, que esta mañana me dice todavía que “conmigo no, elle”… qué lástima que no se lo estén haciendo a ella, qué pena que gente así le sean útiles a los hijos de puta. Y qué cerdada que ese tándem (como otros que hay y hubo) lo sellen con follamientos vía Internet.



Me duele la espalda, los ojos, el otro día venía mi hija llorando porque me había oído en el mismo momento en el que esta basura que es el tal Jorge Castillo Fan alias Player, alias nocturno, alias trasto, alias Gonzalo, alias casanjuntoalrio, alias konstanza, alias mil… en ese mismo momento esta escoria se didicó a meterme una nueva versión de su tortura que es seguir robándome más y más ahora a través de no sé qué hace entre el ratón y el win zip.

Aparece ese cartelito y han desaparecido carpetas enteras con música, fotos, trabajos de mi hijo y mis libros… ¡señoras! Tienen ustedes tanta culpa como él que cada vez que lo intento denunciar, me atacan a mí en lugar de atender a la verdad. Así de simple y así de no tener nada más que decir. O sí, que tengo 55 libros que me costó lo indecible poder llevarlos al registro porque me los robaba. Y a eso es a lo que éste … le llama que yo estoy loca. Y ustedes le aplauden su fiesta.



Viene de haber robado en todas partes. Es la pura verdad. Aquí se ha lavado la imagen, no tiene nombre, tiene Nicks, pero es un delincuente y de la peor calaña, una cosa es robar libros y otra es luego querer robar identidades. Podría cogerlos en silencio, cogerlos en la red puesto que los publico, pero no, lo que hace ahora es tratar de matar a la escritora que hay en mí. Como no le resulta fácil, está haciendo esta salvajada de seis años de agresiones continuas. Cuéntense lo que les dé la real gana, que son sus novias o que yo puedo irme al parque a retozar, pero es lo que es. Igual que él que se sigue contando que es con su pene con lo que puede reducirme a ser lo que le dé la gana a él creer que soy.



Me dirijo imaginariamente a la función que sí escucha: si el poema es posible… será cuando algo en la realidad permita que un hijo de puta no te robe esos mismos poemas. Directa y escuetamente porque eso es lo que lleva haciendo y además a fuerza de miles de roturas y agresiones a lo más personal de cada cual y hablaré de Lacan y de lo que me haga falta hablar porque poder insultos va contra mí y ese es su plan. Psicótico porque es absolutamente una tara grave agredir a una escritura de este modo. Pero psicópata por el grado de degeneración al que ha llegado después de esa enfermiza identificación a mis palabras. No he podido hacer valer todavía ni relatando la situación con miles de datos ni siquiera con evidencias como las de las tantas capturas de pantalla el derecho a que me deje en paz, es un cuelgue, una carga de un tipo que se le ha metido en la cabeza que tiene que ser a costa mía que él se haga su carrera de escritor. Hablo de sobra porque lo único que hubiera tenido que decir era que está causando daño y, si esto no se termina… acaba de señalar, no se termina porque no es un grado de identificación ya lo que permite esa señal sino la idea de aumentar el daño del que trataba de librarme al escribirlo aquí. Adelantarme, anticiparme, para poder eso tengo que dejar claro en algún sitio que es un criminal. Que me repugna la violación que hay al mantener abierta una vía para decir lo que le dé la gana, amenazas, una detrás de otra son esas señales, la amenaza de que no se irá puesto que le es muy ventajoso permanecer aquí. Lo del quédate a mi lado, eso, no se lo cree ni él. Pero sobre todo separo radicalmente lo que fue de lo que es porque así es como consiguió llegar a donde está y sí es un punto psicótico que crea que ensuciando y amenazando podrá convencerme de que es bueno que siga robándome. Es demencial pero lo cree, donde termina la pantomima de la moral, queda desnuda la verdad, por eso que se refuerza en amenazas, detrás de estos actos (TRES BAJAS CON PLAZO SATURADO) hay una verdad absoluta que no emerge porque es de lo que este hijo de la grandísima puta huye. Si a esto le pudiera restar la amenaza, se quedaría la mierda que hay detrás de él. No tengo la más mínima preocupación en competir con este pánfilo, si he traído el texto de Lacan, es porque HAY ACTO. Destruye mis archivos, mi ordenador y mis asociaciones libres para sentirse superior a mí. Así de simple y así de jodido ya que no me está siendo posible que se largue a su mierda de mundo que se reduce a un chat y a varios contactos de los que obtiene dinero para seguir viviendo así.



Tendrían que no hacer falta más palabras, pero esas señales no son palabras, son ACTOS. ACTOS QUE ADOPTAN LA FORMA DE MIS PALABRAS, (señal) ¿SE VE LO QUE HACE? … pero maldita bestia, de nada te servirán. No me cabe en ninguna otra palabra más que en decir “repugnancia” cuando después de esto me ataca, me torea con preguntas tales como que si ya he liberado mi Word, cuando se mete con temas de la salud, cuando pretende darle a un acto de esta saña un aspecto de pìcardía o astucia o mentiras… cuando llevo tiempo diciendo que DAÑOOOOOOOOOOOOOO, me repugnan sus canciones con las que intenta seguir manteniendo que esto es una cuestión de amor, asco, mucho asco porque roba libros, y nada más que eso lleva seis putos años haciendo.




4 de noviembre de 2010

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